Estas tareas deben cumplir los siguientes objetivos:

• Identificar áreas: Indicar el número de pista, las zonas permitidas para el tránsito y los espacios destinados a detenciones temporales.

• Orientar a los pilotos: Brindar información clave para el despegue, aterrizaje y rodaje.

• Mejorar la seguridad: Garantizar marcas y señales uniformes que optimicen la seguridad y eficiencia operativa.

• Distinguir zonas: Delimitar plataformas y calles de rodaje para que los pilotos puedan reconocerlas fácilmente desde el aire.

• Regular el tránsito: Canalizar el movimiento de vehículos y peatones dentro del aeropuerto.

• Guiar a los vehículos: Facilitar la circulación de los transportes que operan en el área de maniobras, asegurando un flujo ordenado de personas y mercancías.

Además, gracias al sembrado de microesferas reflectantes, estas señalizaciones mantienen una visibilidad óptima incluso en horario nocturno.